Con el calor perdemos mucho líquido, que hay que reponer. La deshidratación puede tener graves consecuencias: el cerebro es el que más sufre. Lleva siempre contigo una botella de agua. Puedes añadirle una rodaja de limón o una ramita de menta. Además, el agua elimina la sensación de hambre durante un tiempo, lo que es especialmente importante para quienes quieren perder peso.

Regla n.º 2: dejar el café
El café puede provocar deshidratación. Si no puedes dejar el café por completo, bebe dos vasos de agua después de cada taza para reponer líquidos. Lee aquí lo que hacen las estrellas para sustituir el café.

Regla nº 3: Mantener el consumo de alcohol al mínimo
El alcohol y un estilo de vida saludable en general son conceptos difícilmente compatibles. Creo que no hay que hablar de su efecto nocivo para el hígado y el organismo. El alcohol deshidrata más que el café u otras bebidas.

Regla nº 4: No consumir proteínas “pesadas
Apuesta por las proteínas de fácil digestión que se encuentran en el pescado y el marisco. Reduzca al mínimo su consumo de carne: es una carga demasiado pesada para el cuerpo con el calor. El pescado también puede ayudar a mantener la humedad en la piel.

Regla nº 5: Coma más bayas

Las bayas contienen flavonoides que ayudan a proteger la piel del fotoenvejecimiento. Por no mencionar que son un tesoro de vitaminas, micro y macronutrientes.

Regla nº 6: Incluye en tu dieta hígado de ternera, trigo sarraceno y espinacas.
Estos productos contienen cobre, que participa en la síntesis de la melanina. Su consumo regular ayudará a conseguir un bonito bronceado y a proteger la piel de las quemaduras solares.

Regla nº 7: Practicar la desintoxicación
Cuando haga mucho calor en el exterior, tómese un día de descanso. Esto no significa que tenga que renunciar a la comida por completo, ni mucho menos. Bebe mucha agua y come verduras en cualquier forma: crudas, al horno o a la plancha.

Regla nº 8: Busca productos frescos